El 8 de febrero me acerqué a por el recopilatorio en HD de Metal Gear Solid, el cual incluye Metal Gear, Metal Gear 2 de MSX, MGS 2 Sons of the Patriots, MGS 3 Snake Eater (y del cuál va este análisis) y MGS Peace Walker. Pues bien, ¿por cuál empezar? ni siquiera tuve el menor atisbo de duda respecto a esto, ¿cuál va a ser? el que considero el mejor juego de la saga: Metal Gear Solid 3: Snake Eater. ¿Por qué? porque lo tiene todo, porque fue motivo de compra de la PS2 en su momento, por su trama (la más elaborada en un solo título), por sus personajes, por su jugabilidad, por las novedades que incluía, por sus graficos, y porque venero al maestro Hideo Kojima por encima de todo.
Me alegré enormemente en mayo cuando esto se dió a conocer en la conferencia de prensa de Konami pre-E3 2011. Poder jugar a mis Metal Gear en 360 en HD y con logros (posteriormente poseería una PS3 xD). Pongámonos en situación, llego a casa con el juego, lo desprecinto, leo las instrucciones, que por cierto siempre es un detalle de este juego que incluya un mini comic explicativo con la misión del juego y los controles, y veo los 2 DVDs (el primero con MGS 2 y MGS3, el segundo con Peace Walker) Enciendo la consola, meto el primer DVD y lo instalo en el disco duro. Tras 15 minutillos de instalación ¡a jugar!